Portugal y Suecia se jugaban el pase al Mundial de Brasil 2014 en el repechaje. En la ida, Cristiano anotó el 1-0 definitivo. En la vuelta, Zlatan intentaría revertir la situación con el apoyo de su gente, pero se encontraría, una vez más, con CR7.
“Mi futbolista favorito soy yo”, dijo algún día Cristiano Ronaldo. “Estás hablando con Dios (refiriéndose a él)”, dijo alguna vez Zlatan Ibraimovich. Sus declaraciones arrogantes y egocéntricas los llevaron a ser de los futbolistas más amados u odiados, sin punto medio. Es por esto que en 2013, en el repechaje para el Mundial 2014, el duelo no solo era Suecia vs Portugal, sino que era también era CR7 vs Zlatan: un solo lugar para dos mega estrellas de cara a la próxima Copa del Mundo. Por el orgullo.
La eficacia del “Comandante”, al igual que en la ida, volvía a aparecer: al minuto 49 enfrentó al arquero y, con un remate potente y cruzado, adelantó a los suyos. La historia del primer partido se repetía. “Yo, aquí”, señalaba en su festejo. Zlatan observaba, una vez más, como festejaba el capitán rival. Con el pasar del tiempo se comenzaba a sentir fuera de lo que sería su último Mundial.

Pero pocas personas son más orgullosas que el 10 sueco, tanto dentro del campo como fuera. Y ese repechaje sería otra prueba de lo ya dicho. Un remate de cabeza tras un tiro de esquina y un imponente derechazo en un tiro libre le ponían suspenso a la serie. Por fin aparecía el crack del local. En ese momento, la lucha entre las estrellas, en cuanto a números individuales, estaba igualada: CR7 2-2 Zlatan. Para los países, la situación estaba a favor de Portugal, que gracias al gol de visitante se estaría clasificando (1-0 ida, 1-2 vuelta).
Suecia, volcada al ataque; Cristiano, rápido y decisivo. Ese podría ser resumen de ese glorioso momento para Portugal y pésimo para el local. El reloj marcaba 77 cuando el 7 luso, en una acción similar a la primera anotación, comenzaba a sentenciar la serie: él, el arquero y un zurdazo cruzado. Por segunda vez en la noche, el “yo, aquí” decía presente. CR7 3-2 Zlatan. Suecia necesitaba 2 goles para clasificar cuando solo quedaban 13 minutos por disputarse.
Si alguien en el estadio tenía una mínima esperanza, a los 60 segundos se le desapareció. Otro mano a mano del letal delantero portugués ante el ya frustrado Andreas Isaksson que gana el siete visitante. Hat-trick, récord (igualaba a Pauleta como máximo anotador histórico de Portugal) y pasaje al Mundial. “Yo, aquí”, x3.

Ese 19/11/2013 es recordado hasta el día de hoy como la fecha en la que Portugal dependió más que nunca de su máxima leyenda para poder estar en el torneo más importante a nivel de selecciones. Y también, como el día en el que Cristiano Ronaldo le ganó el duelo a Zlatan Ibraimovich: 4-2.
